En diálogo con los jóvenes de todo el mundo

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Papa Francisco: “No existe la juventud, existen los jóvenes con sus historias, que la Iglesia quiere escuchar”

“¿Qué estás buscando en tu vida? Dilo, nos hará bien escucharte”. Con estas palabras el Papa Francisco se ha dirigido a “No existe la juventud, existen los jóvenes con sus historias, que la Iglesia quiere escuchar”, ha dicho Francisco: “A menudo se habla de los jóvenes sin ni siquiera interpelarlos. Incluso los mejores análisis del mundo juvenil, aunque útiles, no reemplazan la necesidad del encuentro cara a cara”.

“Algunos -ha proseguido- creen que sería más fácil manteneros a una ‘distancia de seguridad’ para no hacerse provocar por vosotros. Pero los jóvenes de hoy nos piden cercanía. Y no basta con intercambiar algún mensajito o compartir fotos graciosas. ¡Los jóvenes deben ser tomados en serio! Me parece que estamos rodeados de una cultura que, si bien por un lado idolatra a la juventud e intenta no dejarla escapar, por otro excluye a muchos jóvenes de ser protagonistas”. “A menudo – ha dicho el Papa – estáis marginados de la vida pública y tenéis que mendigar ocupaciones que no os garantizan un futuro. Muy a menudo se os deja solos”.

Entre los 300 participantes se cuentan jóvenes delegados de todas las conferencias episcopales del mundo, seminaristas y novicios, representantes de asociaciones y movimientos, estudiantes de escuelas y universidades católicas, del mundo de la cultura, del voluntariado y del deporte, así como jóvenes de otras confesiones cristianas y religiones, minusválidos, jóvenes que han vivido el drama de la cárcel, de la trata y de la tóxico-dependencia. Han sido varios los temas que han surgido en el coloquio: las dificultades para formar una familia, la herida del divorcio de los padres, la precariedad económica, la tibieza de una Iglesia de la que tantos se alejan, la incertidumbre del futuro, el miedo a comprometerse, la falta de oportunidades.

Según el Secretario General del Sínodo, Lorenzo Baldisseri, “los jóvenes son al mismo tiempo objeto y sujeto del camino sinodal, llamados a escuchar a sus pastores, pero también a hablar a sus pastores, a abrirles el corazón, en una circularidad virtuosa que es la esencia misma de la sinodalidad eclesial”. Por este motivo, el Cardenal ha anunciado que “el domingo, al final de la Eucaristía que da inicio a los ritos de la Semana Santa y celebra la XXXIII Jornada Mundial de la Juventud, tendremos la alegría y el honor de entregar al Papa el Documento que ha surgido del encuentro pre-sinodal, al cual los jóvenes confiarán los deseos y esperanzas de sus coetáneos de todo el mundo con vistas al Sínodo de octubre”.